Torre Galatista

El símbolo indiscutible de Galatista es su Torre Bizantina. Construida sobre una colina que una vez estuvo rodeada de densos y altos abetos, la Torre de Galatista se remonta a la época veneciana. El primer período de construcción se estima en el siglo XI, mientras que la segunda fase, su parte superior, se completó en el siglo XIV con la torre alcanzando una altura de 16 metros.

Se asemeja a otras torres de la zona y es imponente, y estrecha, con huecos en sus muros exteriores y pequeñas rendijas verticales para las ventanas. Era una fortaleza-observatorio, que ayudaba a la comunicación con la llanura y sus pueblos, a la vez que es posible utilizarla como prisión. Está hecho de piedra maciza y arcilla (los llamados "kurani" o "kourasani"), lo que le daba un color marrón oscuro. Cuando todavía había un bosque a su alrededor, los testimonios dicen que solo desde la distancia se podía localizar, y a medida que te acercabas se perdía en la densa y alta vegetación. Hoy, después de muchos años de restauración, la torre se encuentra en muy buen estado.

Hay muchas historias y conjeturas sobre la Torre y con el tiempo han adquirido el estatus de mito. Se dice que la Torre fue habitada por la Niiridia Galatia, que dio nombre a la torre, o la princesa bizantina Galatia, pero lo único seguro es que la ciudad tomó su nombre de la torre, ya que preexistía.