Cascadas de Edesa

Las famosas cascadas de Edesa, uno de los lugares más impresionantes de Grecia, están rodeadas por el Parque de las Cascadas, un área de unos 100.000 metros cuadrados en el tejido urbano de la ciudad. El espectáculo es inusual, debido a la peculiaridad de la presencia del volumen de agua que cae desde una altura tan grande en el centro de una ciudad, pero también fascinante, tanto como fenómeno como experiencia estética.

Las dos grandes cascadas (de un total de doce) que son visibles y visitables ofrecen una atmósfera única del poder de la naturaleza. Escaleras con vistas a la llanura, un balcón bajo la "cortina" que crea el agua al caer desde arriba, arcoíris en el juego de los rayos del sol en el agua, y coloridos senderos en el Parque para los paseos más relajantes junto a las cascadas, entre la vegetación orgiástica o desde el camino empedrado a la antigua Edesa.

Los lugares de cultura y recreación de la zona, pero también la ciudad de Edesa que rodea el Parque, ofrecen todo lo necesario para escapadas de todo el día, a casi 90 km de Tesalónica. Es necesario quedarse después del atardecer, donde la iluminación de las cascadas convierte la experiencia en algo casi surrealista.