Molinos Allatini

Los molinos Allatini en Tesalónica son un complejo industrial histórico construido en 1923 por la familia Allatini, originaria de Asia Menor. Los molinos se encontraban entre los molinos harineros más grandes y modernos de su época, desempeñando un papel importante en el desarrollo económico de la ciudad.

El complejo fue diseñado según los principios del estilo arquitectónico industrial. Cuenta con un edificio central con elementos característicos como columnas altas y espacios abiertos que facilitan el flujo de trabajo, grandes ventanales que permiten la entrada de luz natural, un elemento crucial para las operaciones industriales, y techos inclinados de hierro y tejas, que le dan al edificio un aspecto tradicional.

Inicialmente, los molinos Allatini funcionaban principalmente como molinos harineros, pero con el tiempo se expandieron a otras actividades industriales. En 1991, la empresa cesó sus operaciones y los edificios permanecieron sin uso durante varias décadas.

El complejo destaca por su valor arquitectónico y su importancia histórica. En 2014, la zona se sometió a una remodelación con el objetivo de transformarla en un centro cultural y comercial. Hoy en día, los molinos de Allatini se erigen como un símbolo del patrimonio industrial de Tesalónica, que encarna la historia y la evolución arquitectónica de la ciudad.